viernes, 21 de mayo de 2010

Yugo improvisado en huacal.


Yugo improvisado en huacal.
Cargado originalmente por Cuando visite el planeta Tierra...

Te miras rara vez en tu movimiento perpetuo. Nunca eres la misma. Ni tú, ni nadie.
Improvisas más que cualquier otro tus movimientos. Las furtivas pesuaciones para acceso al metro o cualquier parte. Conozco tus pasos. En constante lucha, por conservarte tal y como eres.
A donde quiera que vayas o donde sea que me encuentre.
Eres un todo y te ocultas bien entre una ciudad que por más ajena que te paresca te protege.
Mistico mimetismo en comunión.
La carga es tu fusión con un medio invasor al que te acoplas.
Sigues siendo tierra. Por eso te ocultas. Por eso te niegan.
Nos complementas y proteges.
Eres mujer y madre tierra, madre protectora, fuerza en potencia. Oculto poder creador. Y cargas por todos el yugo de un pecado original que no cometimos, que no nos pertenece y sin embargo, llevas con fuerza. A veces a cuestas.
Siempre de pie. Todos te pertenecemos y bien nos representas mujer. Refugio. Por ser tú.

"Sólo el carga el costal, le sabe su contenido"


"Sólo el carga el costal, le sabe su contenido"
Cargado originalmente por Cuando visite el planeta Tierra...

Los domingos llegan con cansancio. Los pies arden y la espalda seguramente se encuentra dolorida. Hay para quienes no llega el descanzo y, ello mismo significa solamente un instante en que por fin, consigues un asiento en el microbus.
El costal no falla. Incansable al trajín. Por momentos soñoliento. Constante bulto al hombro. Sólo tú conoces la carga. Sólo tú sabes cuanto es el peso.